Entre amigos

Sobrevivir no es vivir

En memoria de las víctimas de crímenes por odio y COVID 19, conmemoramos un año más IX Plegaria Rosa, actividad que es desarrollada tradicionalmente por los colaboradores y colaboradoras de Asociación Entre Amigos, es un evento en el que se eleva una plegaria hacia el cielo.

 

 

Por todas aquellas personas que han sido a asesinadas por ser parte de nuestra comunidad LGBTIQ+, por que sus familias no reconocieron sus cadáveres o por que fueron secuestradas y jamás encontradas.

Una plegaria en la que abrimos ese espacio único e importante con un Dios justo, creador del cielo y de la tierra, al que pedimos justicia por todas esas muertes que quedan en la impunidad.

 

Es importante reconocer que el covid_19, solamente ha mostrado lo vulnerable que somos ante estas pandemias ya que el derecho a la salud, a la educación, y un trabajo digno se es negado a las personas de la población LGBTIQ+. Quedando en una desventaja para subsistir de una forma digna.

 

El corazón de la Plegaria Rosa, esta vez tuvo la voz Sebastián Cerritos un hombre transgénero, en el que no solo expreso sus necesidades, sino que también comento la negligencia medica que viven las personas transgéneras en El Salvador.

Cerritos menciona que el no contar con una ley de identidad lo vuelve mucho más vulnerable ante cualquier adversidad, cuenta que el conoció a Mike Mejía un amigo con el que el inicio su tratamiento hormonal casi al mismo tiempo, logrando obtener su expresión acorde a su identidad y expresión de género, compartieron muchos momentos buenos y malos en su proceso.

 

Lamentablemente Mike sufrió un accidente de tránsito, que lo dejo en un estado vegetal, su compañera de vida conmocionada expresa la discriminación que el sufrió por su expresión de género. Ya que los médicos lo veían como un objeto cada vez que los médicos presentaban su cuadro clínico exponían las partes íntimas de Mike para describir su caso.

Vulnerando su derecho a la privacidad, lamentablemente Mike había perdido su trabajo en tiempos de pandemia, y de un día para otro sin notificar a su compañera de vida en ese estado critico lo trasladaron al Hospital Rosales, quedando Mike en un pasillo esperando ser ingresado en dicho hospital.

La salud de Mike era sumamente complicada por lo que no resistió el traslado, falleciendo en el Hospital Rosales, su compañera de vida se entero por medio de una funeraria quien llamo para ofrecer sus servicios y comentarle que su familiar había muerto por COVID-19.  

 

Inmediatamente se trasladó a dicho hospital, enterándose de todo lo sucedido efectivamente era el cuerpo de Mike que aparte de la negligencia medida del Seguro Social, el Hospital Rosales declaro la muerte como Covid_19 por lo que su cuerpo se encontraba junto a los de COVID.

Impidiendo que su compañera supiera la hora exacta de la muerte y el por qué, del deceso, de Mike por motivos de protocolo ella solo tenia un par de horas para poder enterrar a su compañero, si no seria enterrado en las fosas comunes de los cuerpos que no son reclamados por sus familiares.

No hubo tiempo de investigar no había a quien culpar, Mike murió en manos del Sistema de Salud quien desde un único discriminó su identidad y expresión de género, aun estando postrado en una cama sus derechos fueron pisoteados.

Mike se suma a las víctimas de crímenes por odio que se viven, en nuestra comunidad LGBTIQ+.


El lema elegido este año es para conmemorar no solo a las víctimas de crímenes por odio si no también a todas esas personas que perdieron la batalla contra la pandemia del Covid-19.