No no es culpa de la víctima, es culpa de la cultura es culpa de la doble moral que muchas personas manejan a su antojo, como las iglesias que se pronuncian ante las luchas de mujeres vulnerables por sus esposos que en la mayoria de los casos son influenciados por los pastores de las iglecias; escudandose en la palabra de Dios.
En las colonias populares de nuestro país, se escuchan los sermones de los pastores, “La mujer no debe de opinar, porque es el hombre el sabio y es que es el quien sabe cómo hacer las cosas, no le reclame si fallo como esposo y tiene otro hogar; porque es su culpa por no cuidar de el por no tenerle la cena, que no ve hermana, que es el proveedor del hogar. No se queje con las vecinas que solo la van atormentar mejor arrodíllese ante el señor y pida que le perdone los pecados Amén.
Esa es la doble moral, que se maneja según la palabra de Dios, son las mismas que dicen que las brujas salen a marchar, a exigir los Derechos y querer abortar. Si a los hijos de los pastores y sacerdotes, a los hijos de los bastardos que abusaron de sus propias hijas, al hijo del tío borracho que lo sigue manteniendo la mamá que va a esas iglesias doble moralistas.
El silencio también nos vuelve culpables de los feminicidios, por eso salimos a las calles, para que el mandatario se pronuncie y haga valer nuestros derechos, que persigan a los violadores y los encarcelen. En El Salvador las niñas de 10, 14 y 16 años están siendo atendidas en hospitales de maternidad, deben ser las autoridades quienes deben de darle seguimiento a esos casos donde los agresores están es sus casas.
En El Salvador ya no es raro que una menor de edad se convierta en madre. Los partos presentados en adolescentes y niñas han representan el 28% de los partos registrados a nivel nacional, de acuerdo con las estadísticas del propio Ministerio de Salud.
La estadística de partos en menos de edad se divide en dos grupos. El primero es de niñas de 10 a 14 años, mientras que el segundo es de adolescentes de 15 a 19 años y sólo en el año recién pasado un total de 1,300 niñas y adolescentes dieron a luz.